Este
camino (el de las compras) debe su nombre a que antiguamente era utilizado para
intercambiar alimentos entre pescadores que venían del puerto y agricultores
procedentes de Santa Úrsula. Además, los trabajadores de esta zona también lo
utilizaban para bajar y subir desde Santa Úrsula al Rincón. Por aquí también se
bajaba a las fiestas de Santa Ana, en los alrededores de la ermita.
La Ermita está consagrada desde el siglo XVIII,
tiene retablo donde hay tres Urnas con las imágenes de la Virgen de Montenegro,
San José y San Judas Tadeo, así como óleos de gran tamaño y el más importante
el retrato del fundador de la Ermita, Don José de Montenegro, escribano de la
Villa de La Orotava. Todo ello documentado a través de las investigaciones
realizadas por el Historiador de La Orotava Don Antonio Luque.
Aquí eran
celebradas las fiestas en honor a Santa Ana, el 26 de julio, a la que acudían
los vecinos del municipio de Santa Úrsula. Aunque la ermita era privada, los
dueños de la hacienda celebraban la fiesta para que acudiera la gente del
pueblo. Además, se oficiaba una procesión por los alrededores de la hacienda,
decorando el recorrido con flores y con piñas de millo empapadas con petróleo
para iluminar el camino, así como, algunos otros actos como, el juego del palo
o la bajada del arco entre otros. Durante el día, las familias bajaban a la
playa con comida y formaban parrandas; por la noche, se celebraba una verbena
que duraba hasta la madrugada.

